Entrevista con Francisco Belarmino: En la esencia de los medios
Francisco Belarmino nació en Illapel, Chile el año 1988. Estudió artes y luego se especializó como Magíster en Investigación y Creación Fotográfica en la Universidad Finis Terrae. En paralelo a la insesante elaboración de proyectos artísticos a su haber, se ha dedicado a la docencia en varias casas de estudio superior y en otros centros de formación no convencionales.
Desde sus primeros trabajos fotográficos hasta los últimos desplazamientos de video-instalación presentados en una serie de lugares expositivos, ha enfatizado en cuestionar las imágenes y sus medios contemporáneos de producción.
A través de sus obras busca reflexionar acerca de la utilización de los massmedia como sistema de control social, incitando a los públicos con las preguntas ¿qué vemos? y ¿de qué manera la industria de las comunicaciones y sus tecnologías utilizan nuestras imágenes en la cadena productiva de control?
Sus obras se han expuesto en el Museo de Arte Contemporáneo, como parte del concurso de Arte y Tecnología Matilde Pérez, en el Museo de Bellas Artes, y en el Centro Nacional de Arte Contemporáneo en el contexto de la 13 Bienal de Artes Mediales.
También las piezas de este artista fueron alojadas en plataformas nacionales como Galería Bech, Galería Metropolitana, Galería Machinna, Matucana 100, Galería Patricia Ready, así como también en diversos centros culturales del país y en el extranjero, siendo parte de visionados y curatorías en Zurich, Madrid, Roma, Casoria y Buenos Aires.
Con todo esta estela de logros significativos, Belarmino fue reconocido este año 2023 en la muestra 23° Premio de Arte Joven Santiago, de la Municipalidad de Santiago, en el Centro Cultural Palacio La Moneda (CCPLM), donde fue invitado a exhibir la obra Punto de Fuga 1 – Videoesfera, la instalación de una gran pantalla de video ovalada que reproduce las intensas manifestaciones ocurridas durante los últimos años en Plaza de la Dignidad.
Al unísono en la exposición Dispositivos de resistencia al olvido en Casa Palacio de la Universidad de Santiago (USACH), podemos ver del mismo artista la obra Archivo Corrupto, una pantalla vertical descubierta de su carcasa que muestra el zoom a una tarjeta de memoria SD quemada, haciendo referencia al caso de las “memorias de go pro” pérdidas por la fuerza policial a raíz de la muerte del joven Camilo Catrillanca en la Araucanía durante noviembre de 2018.
Sobre todo el acontecer de estas obras y de otras apreciaciones de la postproducción y la materialidad de las imágenes, conversamos con Francisco Belarmino.
¿Cómo se origina Punto de Fuga 1 – Videoesfera y en qué contexto se relaciona con la muestra Arte Joven en el CCPLM?
Este trabajo es parte de una serie de obras que estoy generando en este soporte, que es una pantalla esférica de led. En esta ocasión lo que presenté al concurso tiene que ver con el estallido social y como nos enfrentamos a esas imágenes.
¿Por qué la operación de estirar o ondular la imagen de un registro que es verídico? ¿de algo que ocurrió?
La manipulación de la imagen siempre ha sido una constante en mi trabajo, desde la post producción, desde la toma. En este caso se trata de una ángulo cenital en donde los manifestantes se están enfrentando a la fuerza policial de carabineros, justo en la zona cero donde yo también vivo.
Lo que me interesa del formato que da la esfera, es que al tener una baja resolución desde cerca tú ves más bien materialidad en torno a la pantalla y eso te exige moverse alrededor de ella y establecer un punto de vista respecto de las imágenes que estás viendo.
La manipulación siempre tiene que ver con dirigir un poco la mirada respecto de nuestra posición frente a la obra.
A las personas anónimas del video les das una identidad. ¿Las personificas como personajes y las incrustas en un contexto político donde son manifestantes o son ciudadanos?
En el contexto del estallido social había en la calle un montón de personas. En general éramos todos manifestantes, todos nos manifestamos ante un descontento y eso es un acto performático por lo tanto.
Justamente el registro que estoy mostrando muestra a sujetos que están lanzando piedras, objetos, defendiéndose del actuar de Carabineros, pero no estoy individualizando necesariamente ni personificando, estoy haciendo una representación del relato colectivo que se vive también en el presente.
Durante el estallido social todos ocupamos nuestros teléfonos para grabar las cosas que pasaban, eso fue un medio de comunicación bastante válido en un contexto en donde se ocultaba información y se tergiversaron los hechos, de esas imágenes me interesa hablar.
Sobre llevar el registro original a esta gran esfera lumínica ¿qué te parece la espectacularidad que se logra con el efecto lumínico en el espacio de muestra?
Toda pantalla tiene una carga ideológica, desde los inicios del cine y a partir de las primeras imágenes en movimiento hasta la actualidad, por eso todo este campo visual se vincula a una forma de pensar el mundo y dirigir la mirada.
Hay una cuestión política detrás del uso de cualquier imagen, desde la propaganda y la publicidad, entonces el uso de esta pantalla esférica no es inocente porque se ocupaba para fiestas, en el entretenimiento y ocio, y justamente yo las saco de ese contexto y las traigo al espacio del arte con el objetivo de hacer un contrapunto.
Vimos imágenes del estallido social en donde muchas personas sufrieron atentados, cuerpos dañados fueron mediatizados ideológicamente a través de muchas pantallas.
Hablo de asuntos que todavía están un poco en el inconsciente de las personas porque efectivamente fue un episodio del país que marcó un antes y un después, y en el caso de la instalación a veces primero aparece el objeto de luz, la esfera antes que su contenido, lo que corresponde a los temas que no están totalmente acabados.
¿Me puedes hablar de Archivo Corrupto? ¿Siempre un código digital que no está completo es algo no está permitido?
El trabajo nace a partir de un hecho de corrupción importante en Chile, que es cuando las fuerzas especiales del Comando Jungla intentan eliminar la evidencia de que había muerto Catrillanca.
Este suceso resultaba más bien un ocultamiento de la información porque al comienzo hubo varias versiones. Al comienzo se dijo que no existía esa tarjeta de memoria, después señalaron que los superiores habían mandado a eliminar ese registro, -y eliminar en el fondo es destruir-, pero luego finalmente se filtra y el video termina en la fiscalía y los medios.
En esa historia está la malversación del dato digital y simbólico, por eso propongo de manera más literal la forma en que se trató de ocultar la verdad.
Ahora que ya hablamos de tus trabajos ¿nos puedes compartir una prospección de cómo vendrá la nueva generación de imágenes asociadas a la inteligencia artificial y cómo afectarán lo que veremos de tí en los próximos años?
Pienso que en mis trabajos siempre estoy agarrándome de cuestiones que ocurren en las noticias o en los medios, por una parte, y por otro lado, también tengo un desarrollo que es plástico para entender la pantalla en sí misma, analizarla como material y soporte que emite luz en apariencia de lámpara.
Esas fuentes de provocación en general van a ir cambiando en sus formas, pero no en la esencia, con esto me refiero a que me interesa como a través de los medios o la pantalla se empiezan a crear imaginarios, a dirigir la mirada, a sesgar ciertas cuestiones culturales o contextuales.
Los nuevos adelantos tecnológicos nutrirán mis procesos, al igual que lo hacen el cine o las primeras imágenes en movimiento.