El trabajo de Demian Shopf se ha caracterizado por recorrer distintos registros y géneros. En su trayectoria artística ha utilizado fotografía, video, software y hardware. Sus primeros trabajos giraron en torno a los ángeles apócrifos con la serie “La Revolución Silenciosa” (2001-2002) y las imágenes de un Cristo clonado, como representación de la Santísima Trinidad en en “Babel/Hrön” (2003); también ha abordado visualmente los sincretismos del mundo andino en las series fotográficas (“Los Coros Menores” o “Los tíos del Diablo” (2010-2011) y “La Nave” (2015). Asimismo, ha desarrollado sus máquinas, suerte de interfaces de visualización de información en las que da encuentro a narrativas a través de medios digitales de conectividad de datos a través de internet en formato web e instalación, siempre entorno a una reflexión sobre palabra, lenguaje, cultura y sentido.
Todos estos trabajos pueden ser leídos bajo el concepto de neo-barroco. Para el artista, el Neo barroco es realmente la primera vanguardia latinoamericana.
El trabajo que más lo ha distinguido en el ámbito de las artes mediales es su “Máquina Cóndor”. Ahí el concepto de Neo-barroco opera no sólo como una referencia al poema de Luis de Góngora -al que refiere la obra como sintagma de orden de los términos que el software toma de la red- sino también a los conceptos implícitos en esa búsqueda de información: la muerte, el cuerpo, como retóricas culturales características de nuestro contexto.
En términos visuales su trabajo ha estado influenciado por el cine que aludía a imaginarios distópicos como Blade Runner, de Ridley Scott, Brazil de Terry Gilliam, 1984; la literatura, mencionando especialmente a su padre Federico Schopf y su novela “Escenas de Peep Show” (1976) “donde saca a relucir una lenguaje plagado de tubos fluorescentes, y alguien que es rasgada con un bisturí para introducirle una computadora”; la música industrial experimental; el trabajo de su propio hermano Martín Schopf (Dandy Jack), Einstürzende Neubauten, Kraftwerk, y los artistas Santiago Ortiz, David Link, Nam June Paik, Anselm Kiefer. Reconoce una preferencia por dar materialidad a sus trabajos “Me gusta el óxido, me gusta la corrosión, me gusta el Agorex, me gusta el acrílico transparente, me gusta el destripar”.