Latinoamérica en “Electric Dreams: pioneros del arte y la tecnología antes de Internet” en el Tate Modern
Hace setenta años el arte ha ido explorando consecutivamente sus simbiosis posibles con las máquinas. En la Tate Modern de Londres una muestra indaga en la la historia de aquella pesquisa, enfocándose en sus comienzos. El nombre del proyecto es Electric Dreams. Art and Technology Before the Internet.
Lo que expresa su curadora Val Ravaglia sobre la exposición es “una red de historias sobre artistas que, entre los años 50 e inicios de los 90, trabajaron bajo la inspiración de los métodos y las herramientas de la ciencia y la tecnología, que en aquella época se consideraban nuevos o emergentes”.
hasta el 1 de junio de 2025, la Tate Modern en Londres presenta la exposición Electric Dreams: Art and Technology Before the Internet, una ambiciosa muestra que explora cómo artistas de todo el mundo, entre las décadas de 1950 y 1990, incorporaron tecnologías emergentes en sus prácticas artísticas. La exposición reúne más de 150 obras de más de 70 artistas internacionales, destacando la intersección entre arte, ciencia y tecnología en el periodo previo a la era digital.
Entre los artistas latinoamericanos presentes en la exposición, se encuentran figuras clave que desafiaron los límites de la percepción, la materia y el código:
Jesús Rafael Soto (Venezuela)
Figura esencial del arte cinético, Soto trabajó con estructuras visuales inestables y campos vibratorios que invitaban al espectador a moverse y activar la obra. Su enfoque anticipa nociones contemporáneas de interacción y performatividad del arte, muy anteriores a las interfaces digitales.
Carlos Cruz-Diez (Venezuela)
Otro pilar del arte óptico y cinético, Cruz-Diez articuló complejas instalaciones lumínicas y cromáticas donde el color se vuelve autónomo del soporte. Su presencia en la muestra subraya la dimensión fenomenológica y tecnológica del arte latinoamericano, muchas veces ignorada por los relatos eurocéntricos.
David Medalla (Filipinas/Venezuela)
Aunque nacido en Manila, Medalla vivió y trabajó en Caracas durante los años 60, y su práctica ha sido reivindicada por varios historiadores latinoamericanos. Su famosa Cloud Canyons, una “máquina de burbujas”, es un ícono del arte auto-generativo. Medalla propuso una poética radical de la materia viva y efímera, que anticipa el bioarte y la estética de sistemas abiertos.
Manuel Barbadillo (Cuba/España)
Si bien es usualmente catalogado como español, Barbadillo nació en Cuba y exploró tempranamente el uso de la computación algorítmica en el arte visual. Sus composiciones modulares y simétricas dialogan con los lenguajes de programación y con patrones geométricos presentes en saberes ancestrales.
Eduardo Kac (Brasil)
Pionero del arte telemático y biotecnológico, Kac figura en la exposición como una de las voces más influyentes en la articulación entre arte y genética, redes y lenguajes vivos. Su temprana experimentación con tecnologías de telecomunicación y con organismos vivos prefigura las discusiones actuales sobre posthumanismo y ecología crítica.
La inclusión de estos artistas en Electric Dreams invita a revisar la historia del arte tecnológico desde una perspectiva más plural. América Latina, lejos de ser un territorio periférico, ha producido visiones singulares de la relación entre cuerpo, máquina y sociedad. Su presencia en una institución como la Tate Modern marca un reconocimiento tardío pero necesario a su legado. Esta exposición no sólo ilumina el pasado, sino que señala hacia el futuro: un campo de las artes mediales donde las tecnoestéticas del sur tienen mucho que decir.